El cambio más importante que destaca en el Aston Martin V8 Vantage S es su motor, que conservando sus 4,7 litros y los ocho cilindros que le dan nombre, extrae ahora 436 CV y 490 Nm. Con una transmisión SportShift II retocada para ofrecer unas marchas más cortas, y unida al volante, una dirección más ágil y rápida.